Kove jey en Schoenstatt
¿Será que todos los grupos se quieren como nosotros nos queremos? Nos preguntábamos al final de la tarde el 21 de octubre. Y es que nuestro grupo no es una comunidad, no es un circulo, es una ¡¡Familia!!.
Todos empezamos este camino hace un año con más preguntas que respuestas y hoy, tenemos cada día mas certezas que cuestionamientos. Nos unió nuestra pasión por nuestra familia, y nuestras ganas de ser cada día mejores personas, católicos, esposos, padres, hijos, hermanos, amigos… y siguieron consolidando nuestra unión las vivencias y ganas de seguir creciendo juntos…
Y por fin llegamos a nuestra primera meta juntos, comprometernos como grupo frente al movimiento… Cada uno de nosotros llevaba en su corazón la emoción de ser desde ese día un verdadero hijo elegido del Padre José, el mismo Padre que tanto nos acompañó durante este primer año y que tanto aprendimos a querer… Y a admirar…
Nuestra Madre Buena, la Mater nos esperaba con los brazos abiertos y el corazón emocionado… éramos 14 grupos que ese día sellábamos nuestro compromiso con Ella, con el Padre José, con el Movimiento.
Los nombres de nuestra “promoción”, los símbolos y las oraciones eran hermosas, notamos que cada grupo era perfectamente representado por estos y que todos, se sentían orgullosos y encarnados en los mismos. Banderas, maquetas, carteles y cuadros fueron expuestos por los jefes electos de cada grupo que con emoción y alegría mostraban por primera vez todo el trabajo hecho y todo el amor puesto en la previa a ese momento tan importante.
Unos emocionados papás en el movimiento nos acompañaron y nos presentaron, con el orgullo frente al Padre Antonio y a todos los hermanos congregados al pie de el Santuario…
Con voces fuertes y convencidas cumplimos el rito, presentándonos y solicitando nuestra incorporación movimiento. Felices y con una gran sonrisa de bienvenida y algunas lágrimas que se escapaban Margarita y Alcides Gonzáles nos dieron la bienvenida en nombre de la rama Familiar…
Como sello reunidos en torno al Santuario, rezamos la oración que tanto significa para nosotros, lágrimas y abrazos en ese momento en que desbordados de alegría en ramitos como de flores nos entregamos a tan querido Movimiento y a nuestra Madre y Reina Tres Veces Admirable…
Al finalizar la misa nuestros hermanos mayores del nivel Alianza nos ofrecieron un cariñoso brindis, y un hermoso y significativo recuerdo, UN ARBOL, que formará pronto parte de Tupârenda, y deberá ser regado y cuidado, como nuestro grupo para que crezca fuerte y sano...
Creo que cada uno de los grupos que hizo su compromiso sentirá ese profundo y gran agradecimiento que sentimos nosotros por nuestros papás en el movimiento…
El matrimonio encargado de nuestro grupo María Lis y Ricardo Abente, supo infundir en nosotros esa fe, entusiasmo, unidad y un gran sentido de pertenencia, que hoy sentimos, y el cual nos hace estar convencidos, de que aunque seamos “jovencitos e inmaduros” en este camino, somos desde ya ORGULLOSOS SCHOENSTATTIANOS…
Todavía no tengo respuesta a nuestra primera pregunta… pero si se, que nuestro Grupocho 2005 KOVE JEY tiene mucho por andar… estamos felices de haber “Renacido” juntos cuando la Mater nos juntó y esperamos seguir haciéndolo en este hermoso camino que ahora empezamos a caminar.